“Ningún viento es favorable para el hombre que no sabe a dónde va” (Séneca)
El camino del aprendizaje se
convirtió en un mar… el mar de los sentimientos, esta entrega nos enseña como
surcar este mar cómodamente en el mejor transporte, el más seguro y en el menor
tiempo, que es “el Barco de la motivación”. En la presentación del blog hablo de
cómo educar a los niños del siglo XXI; el uso de la motivación para educar es
una práctica a prueba de errores, pero
existen métodos que plantean el castigo y las recompensas, basado en la teoría de BurrhusFrederic Skinner que sí sirven, pero traen consecuencias muy
graves.
La motivación es lo que nos mueve a la acción. En el camino del
aprendizaje nos encontramos con: el aprendizaje de un lado (este puede ser
interesante innovador y con todos los atributos que queramos) y al otro lado al
niño al quien esta dirigido, pero si el niño no tiene un motivo (interno) o el
incentivo (externo) no existirá esa movilización para hacer este viaje del aprendizaje.
Burrhus Frederic Skinner plantea
algo totalmente opuesto a lo anterior el dice que se puede “Motivar” con premios y castigos. Aunque los nuevos planteamientos educativos traten de impulsar la
motivación como eje en el aprendizaje, la teoría de Skinner sigue muy difundida de forma
inconsciente. Y en realidad es un “hoyo profundo y peligroso”
en el Camino del Aprendizaje. ¿Por que lo digo? en animales es muy efectiva
para entrenarlos en donde no se necesita una reflexión mas allá de la
obediencia, pero en el ser humano causa una doble moral, esto es, obedecer las
reglas cuando se puede ser sancionado, pero si se tiene la oportunidad se
desobedecerá de inmediato.
En el caso de los premios se simula
lo que sea posible para obtener el beneficio con un mínimo esfuerzo. Esta teoría crea gente perezosa y un sistema de simulación constante
Un regalo inesperado (que no
necesariamente tiene que ser un objeto, también puede ser un abrazo o un reconocimiento
verbal, por dar algunos ejemplos). Se ha demostrado que si a un grupo de niños se les promete una
recompensa por su trabajo se obtendrán peores resultados que si no les hubieras
ofrecido la recompensa, por que solo se concentran en la recompensa y no en la
actividad. En el caso de recibir una sorpresa, ésta los estimula por tener el incentivo ya que lo relacionan
con su buen desempeño y se esfuerzan en demostrar que son merecedores de la
sorpresa. Un error muy típico es
prometer regalos en fechas claves como
Navidad, día del niño, o los cumpleaños, si los resultados son buenos y al
contrario si no lo son; no secuestremos las fechas estas son independientes de
los resultados escolares y los regalos no se canjean por buen comportamiento o
por buenas calificaciones.
El miedo y la imposición son formas para bloquear al dúo de
Amígdala e Hipocampo, creando aversión a los contenidos. El miedo al contrario de la motivación nos
guía a la inactividad. Dice un dicho que no hay mal que dure 100 años ni nadie
que lo aguante, el barco de lo digo yo provoca la rebeldía, en períodos críticos
de las diferentes etapas de la vida humana se potencializará. Recuerda que con
los castigos el niño evitará realizar la acción que le causó el castigo, pero
no será la reflexión quien lo guíe, ni la razón para que de forma voluntaria deje de realizar la acción.
Nota: A lo largo de su desarrollo los niños pasan por períodos en donde desafían
la autoridad para fijar límites o cuando ponen en riesgo su
integridad y/o la de los demás. En estos casos hay que ser firmes con las reglas y fijar
rangos de conducta, sin imponer indiscriminadamente nuestra autoridad.
¿Como motivar? ¿De donde nace la motivación?
Para ejemplificar la motivación usaremos uno de los momentos
en los que nuestros hijos se encuentran más motivados: el JUEGO. Cuantas veces
no hemos oído, dicho o pensado “para jugar está bien dispuesto, pero para el estudio
nada”. Imaginen si pudiéramos trasladar esa energía o guiarla.
Primero debemos tener en cuenta que deben de existir ciertas
condiciones para que un niño juegue, no estar cansados, no tener hambre, un espacio mínimo con condiciones
ambientales adecuadas y estar dispuesto al juego. Para la motivación es
lo mismo se necesita que estén cubiertas mínimamente sus necesidades básicas y remarco estar “dispuesto al juego” este es
un elemento fundamental en la motivación por que implica un esfuerzo para alcanzar
los objetivos.
Para jugar siempre existen implícitos o explícitos los
mecanismos del juego estos los denominamos Objetivos. Si se juega en grupo debe de existir un consenso en los objetivos, incluyendo cuando se gana y se pierde. Si somos ambiguos
podemos perder el interés de los jugadores o provocar conflictos. Para la
motivación en el aprendizaje es igual, debemos de tener claro a
donde queremos llegar, para no trabajar indefinidamente sin saber si hemos alcanzado o no nuestros objetivos.
El aprendizaje también debe ser divertido y tener una razón, un
incentivo o una combinación de las siguientes tres características: Para
satisfacer la necesidad de Afiliación
Social (ser parte de un grupo) ejemplo: el jugar futbol con otros niños
y ser parte del juego grupal; necesidad
de Satisfacer
el Poder (tener control sobre otros miembros del juego) ejemplo: para
algunos niños les es muy importante ser los líderes de los equipos y esto los
estimula; necesidad de Satisfacción de Logros (como los
deportistas que buscan demostrar sus capacidades a los demás) ejemplo: anotar un
gol jugando futbol.
Así mismo, debe dejar en el niño algo positivo; el juego deja la sensación de emoción y el sentimiento
de pertenecer, ser apreciado y probar sus capacidades ante los demás y ante uno
mismo. La motivación nos mueve para obtener, sentir, conocer y esto implica un esfuerzo; sino existieran estas
razones nos toparíamos con una pared.
Y una de las premisas fundamentales
debe contener un reto. Deben ser
difíciles las metas, pero no inalcanzables o imposibles; esto estimulará la necesidad de autosuperación. Esto se aplica
literalmente para el juego y la motivación.
Datos de interés:
Los niños que se encuentran en
edad preescolar, están creando su personalidad y podemos sumar dos factores más
que nos pueden ayudar para motivarlos.
Heredar gustos; los niños por su
necesidad de cohesión social repiten comportamientos y en esa repetición
mecánica se incluyen los gustos de los papás o cuidadores, sus opiniones y
hasta los prejuicios. Recuerda que un padre o cuidador es el ejemplo para los niños, por eso es importante ser
congruente con lo que se les dice y lo que se hace.
La otra herramienta es guiar los
intereses. Los niños van creando sus intereses, con un poco de paciencia y
creatividad podemos guiarlos y promoverlos, como preferir un libro, tipo de
juego o programa de televisión. Recuerda que un niño animado tiene todo lo que
necesita para continuar este camino del aprendizaje.
Dar incentivos no es lo mismo que
premiar. Cuando el niño de su mejor esfuerzo no se te olvide demostrarle de una
forma breve, sincera, de forma cálida y oportuna tu opinión. Recuerda no es el
resultado, es el esfuerzo lo que tenemos que incentivar. En la vida el
crecimiento es constante y lo que buscamos alentar es que los niños busquen dar
lo mejor de ellos.
Y juega todo el tiempo, realiza
juegos guiados y libres, de mesa, al aire libre, en un espacio cerrado, lo
importante es motivar a los niños. “El juego es la escuela que dejó la
naturaleza para aprender.”
Termino esta entrega con un pequeño artista muy motivado. ¡Que lo disfruten!
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