“Quien logra la
victoria sin cometer errores conquista a
un enemigo ya vencido”
Sun Tzu, El arte de la
guerra.
Empecemos esta entrega con una
reflexión; imagina que le estas enseñando a andar en bicicleta a un niño; para
ese fin te encuentras solo concentrado en enseñarle a andar en bicicleta (sin
distracciones), es una calle cerrada o un parque para evitar el pasar de los
autos (seguridad) y se encuentra el niño con una bicicleta adecuada a su tamaño
(retos adecuados para el niño) y con las medidas de seguridad como casco y
rodilleras. Ahora pasa algo inevitable en el proceso de aprender a andar en
bicicleta, el niño se cae.
¿Qué haces?
- Corres a regañar al niño.
- Le dices déjalo yo lo hago.
- Lo comparas con alguien más.
- Le prohíbes andar en bicicleta.
- Lo felicitas.
- Revisas si no se hizo daño y lo alientas a seguir intentándolo.
A partir de lo que uno haga en
ese momento dependerá la reacción del niño, si aprenderá o no a andar en bicicleta. ¿Sabes andar en bicicleta?
sí la respuesta es afirmativa, te has caído de la bicicleta y hasta puede que
tengas ya técnica para caer sin hacerte daño.
Analicemos las opciones: