En el salón encontramos un cara de niño, hicimos una investigación y estamos clasificando insectos y otros bichos; por lo que veras mucho material lleno de imágenes de insectos esta semana. Espero que les sirva y les guste.
Es un excelente pretexto para iniciar un proyecto, trabajar con el campo formativo de exploración y conocimiento del mundo.
Los niños podrán describir las diferentes características de los insectos, como color, forma, partes del cuerpo. Podrán hacer hipótesis sobre tipo de alimentación, hábitat, forma de nacer y crecer, posteriormente utiliza la investigación para que puedan corroborar la información previa que tenían.
Durante la investigación es importante que puedas involucrar a padres de familia, invitarlos a seleccionar varias fuentes de consulta como: revistas, vídeos, libros. enciclopedias, etc.
Te recomiendo que la investigación contenga preguntas específicas, ya que será más sencillo para los niños recordar la información que lleven a la escuela. Por ejemplo: ¿Cómo se alimentan los caras de niño?, ¿Dónde viven las tarántulas?, ¿Cómo nacen las palomillas?.
Puedes variar los criterios de búsqueda y el tipo de bichos de acuerdo a los intereses de los niños.
Al observar los bichos no pierdas la oportunidad de que comparen características, encuentren semejanzas y diferencias entre ellos.
El cierre de tu proyecto marcará la diferencia, recuerda regresar a las preguntas iniciales y evocar sus conocimientos previos comparando con lo que han aprendido, este proceso de metacognición donde los niños estén conscientes de lo que aprenden les ayuda a mantener una actitud positiva hacia la investigación, volver a realizar preguntas y buscar las respuestas. Y éste es el camino para el pensamiento reflexivo.
